El mes de Noviembre nos trae nuevas Marchas Cicloturistas por toda la provincia. Después del parón veraniego, volvimos a sudar el maillot con la II Cicloturista Castilblanco de Los Arroyos. Esta es la crónica:
A las 10:00 de la mañana y una vez retirados los dorsales en la Casa de la Cultura, dio comienzo la II Cicloturista Castilblanco de Los Arroyos. Esta edición se caracterizó por una excelente participación (225 inscritos) y, al contrario del pasado año, las altas temperaturas alcanzadas para la fecha en la que estamos.
Salimos desde la c/ León Felipe a las puertas del Ayuntamiento y tras un breve recorrido urbano, tomamos la carretera A-8002 (Castilblanco-Burguillos) hasta comenzar el Camino del Gergal. Antes de llegar a este punto, ya sufrimos el primer contratiempo de la marcha: al compañero Gabriel se le cruzó un perro que nos " acongojó " durante unos minutos. El animalito quiso probar su peso in situ y no tuvo mejor idea que pasar por debajo de sus ruedas. Menos mal que Gabriel con una agilidad impresionante, pudo saltar por encima de la bici y no sufrir mayor consecuencias que un simple rasguño.
Superado el sustillo, continuamos por la Vía Pecuaria (Camino Santiago) que va hasta Guillena. Este tramo fue el más impresionante, tanto por sus vistas como por la dificultad técnica del mismo. Además, todo este recorrido fue progresivamente descendente.... con lo que posteriormente, todo se tornaría muy, muy, muy cuesta arriba.
Llegados al Polígono Industrial de Guillena, hicimos un receso que nos mantuvo bajo un sol de justicia durante un tiempo quizás excesivo. Continuamos por las calles de Guillena hasta tomar en la c/ Cruz de la Mujer la famosa Ruta del Agua.
A partir de este lugar, empezamos progresivamente el ascenso hasta Castilblanco. Abandonamos el itinerario principal de la Ruta del Agua para tomar el Tramo Restringido, donde pudimos comprobar que ha sido recientemente adecentado con tierra compactada. Pasado el Restaurante La Cantina y llegados al Merendero, procedimos a la ingesta de un más que merecido Avituallamiento tanto sólido, como líquido. Sobre todo éste último. Se hechó en falta un pequeño refrigerio líquido (agua) antes de este punto sobre todo por el exceso de calor.
Repuestos del primer tirón, comenzamos con lo bueno; con lo que de verdad nos hizo sudar y sufrir. Primero el Alto del Toro y el Camino del Serrano y cuando pensábamos que ya habíamos finalizado con lo más duro, los hermanos Hispabikers Arty y Antoñito, nos dieron unas pequeñas pautas sobre la Presa de Castilblanco y su maravillosa cuesta para llegar al final de la Marcha. Más de uno, empezó a recordar la similitud con la Cicloturista de Villarasa del pasado año. Sobre todo cuando comprobamos a la llegada que los 49kms programados, se habían convertido en 58kms.
Exhaustos y casi con un golpe de calor a cuestas, pudimos llegar al Recinto Ferial, lugar donde disfrutamos de una exquisita y variada comida: entremeses ibéricos-picadillo-caldereta o potaje-postre.
Nuestra más sincera enhorabuena a la Organización y al apoyo técnico y logístico de los Hermanos Hispabikers: Juano, Pepe Kiki, Arty, Antoñito, Antonio XTR y compañera.
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