A partir de las 08:30 horas y con el miedo en el cuerpo por las altísimas temperaturas alcanzadas en estos últimos días, esperábamos la llegada de nuestros hermanos en la puerta del Bar El Cruce de nuestra localidad.
Poco a poco, la Avenida de Andalucía fue tomando un color rosaceo, negro-amarillo y azulón, llamándo la atención de los viandantes y lugareños que con extrañeza comprobaban como casi 50 bikers daban un particular colorido a la mañana minera.
Una vez comprobado que no faltaba nadie de los participantes previstos y tras una breve charla sobre el recorrido a realizar, a las 09:45 horas comenzamos a pedalear por la Carretera de Constantina SE-6100, pasando junto al Colegio Público Virgilio Fdez. Pérez y abandonando la localidad junto al Cementerio Municipal.
La primera característica que los participantes noveles pudieron comprobar, es que salgas por donde salgas en Villanueva del Río y Minas, lo primero que encuentras son cuestas y "repechitos". En esta ruta en concreto, fuimos ascendiendo sin parar hasta casi los 18 primeros kilómetros.
A la altura del kms 5 aproximadamente, el pelotón se desvió a la izquierda de la SE-6100 para tomar la pista que lleva hasta uno de los puntos más asombrosos de la ruta: La Estación de Tratamiento de Agua Potable (ETAP) del Huesna Las Chimeneas. Las vistas que nos ofrece el cauce de la Ribera del Huéznar, la primera subidita hasta el nuevo Depósito de Cabecera y el curioso repechito del 13% hasta llegar a ella, no tienen desperdicio.
Repuestos del susto inicial, abandonamos la pista asfaltada para iniciar el Carril de Rilla en sí. Camino de tierra con una bajada infernal al principio, cargado de lajas de pizarra que nos hizo ir con mucha precaución y con constantes sube-bajas.
La primera parada de reagrupamiento la realizamos a la altura del Cortijo de Rilla puesto que como suele pasar en este tipo de rutas con distintos niveles entre los participantes y la dureza inicial de la misma, el pelotón se fue estirando bastante.
Recobrado el aire, los más ingenuos pensaban que ya estaba todo hecho...y lo mejor estaba por llegar. Seguimos ascendiendo poco a poco hasta pasar junto al Cortijo de Rilla Alta y desde allí hasta la cuestecita que hizo poner el pie en tierra a más de uno/a: La Cuesta del Madero. En este punto comienza el Parque Natural de la Sierra Norte y se puede divisar tanto el Embalse del Huéznar como la localidad de El Pedroso.
Seguidamente, otra espectacular bajada en la que hay que tener cuidado de no darse de bruces hasta finalizar el Camino de Rilla junto a la puerta de acceso de la Presa del Huéznar en la Finca Dehesas Frías. Allí nos esperaba uno de los mejores momentos de la jornada: el Avituallamiento en la Fregoneta del Sr. Cuadrado. Los compañeros veteranos Angel y Antonio, nos esperaban con una nevera cargada de Coca-Cola Zero, agua helada y barritas energéticas, que nos supieron a gloria y nos refrescaron de lo lindo.
Con otro color de cara, iniciamos la marcha de nuevo por la Carretera de Dehesas Frías hasta llegar de nuevo a la Carretera SE-6100. Giro a la derecha y a seguir pedaleando por asfalto hasta llegar al Cruce de El Herrero. Allí repostamos de nuevo agua fría y asistimos al compañero de la Pringá que sufrió una picadura en la cara.
Por el Camino del Herrero circulamos mucho más distendidos dado que ya comenzamos a bajar desde la Sierra Norte hacia la Vega del Guadalquivir. A unos 5kms del inicio del Camino del Herrero y a la altura de un paso de agua, volvimos a girar a la derecha para acceder a otro punto increible de la ruta: El Camino de Villanueva.
Este camino discurre entre la linde de dos fincas, teniendo que realizar a pie los primeros metros puesto que la vegetación casi cubre el itinerario convertido en una senda casi oculta. Otro dato peculiar era que el olor a poleo inundaba el ambiente, ofreciendo una fragancia impactante a los maravillados participantes.
Poco a poco la senda se fue convirtiendo en un camino que nos llevó hasta una zona de olivos, para seguir bajando hasta unas plantaciones de naranjos y melocotones en las Fincas de La Bautista y El Tamoso. Desde allí, y tras dejar atrás unos bancales de arena, llegamos hasta el lugar de celebración de la Romería de la Vírgen del Rosario de Alcolea del Río y ya con la calor haciendo mella, hasta el Cruce de Villanueva en la Carretera A-436. Allí aprovechamos para tomar otro refrigerio en la furgoneta del Sr. Cuadrado.
Tras acceder a la A-436 y recorrer un par de kilómetros, junto al Arroyo Galapagar tomamos el último tramo de camino de tierra junto a las antiguas instalaciones mineras del Pozo nº 7. Recorridos casi 50 kms de puro btt, llegamos al final de nuestra ruta en la Placita de Santa Bárbara.
Allí nos esperaban nuestros amigos de la Bodeguita La Placita que gentilmente nos prepararon una estupenda Paella de Confraternidad. Esto, junto a las bebidas refrescantes de cebada y al chapuzón manguerazo en el Puesto de Chuches Pinto, hizo las delicias de todos/as los que participamos en este día de convivencia ciclominero.
Para finalizar, los más rezagados se quedaron a tomar un merecido cafelito+heladito en el Bar El Cruce, donde agradecimos de nuevo la presencia de nuestros Hermanos y el detalle que tuvieron los Hmnos de La Pringá al regalarnos un precioso llavero con su logo, que servirá para portar las llaves de nuestro Club.
Sin lugar a dudas, experiencias como estas son las que hacen grandes a los Clubes y compañeros/as participantes.
A preparar la siguiente ya.....
Buena crónica hermano.
ResponderEliminarUn abrazo!
RiPliE
C.D. Hispabiker